Andalucía tendrá un banco público. Se ve que las Cajas de Ahorro no bastan. Para entender la cuestión, hay que ir a los flujos de dinero: el asunto se ha aprobado con los votos favorables de PSOE e Izquierda Unida. Se trata de “economía social”, esto es, de que unos paguen impuestos y otros vivan de los que los pagamos.
Socialismo puro que, para legitimarse, se convierte en bandera electoral: la iniciativa está en el programa electoral de IU y del PSOE. Una vez más, el socialismo justifica políticamente que el dinero salga del bolsillo de unos para pasar al de otros (legalmente). Es la esencia del socialismo. La finalidad del banco público, como antes de las Cajas de Ahorro, es “facilitar financiación a la economía social”. Algo que, por supuesto, no tiene nada que ver con una captación masiva de votos.
Y además, con vocación de durar: sus promotores han señalado que la vocación del banco no es coyuntural, para la crisis “sino estructural como instrumento público financiero netamente andaluz de apoyo al desarrollo económico y al empleo”. Socialismo químicamente puro: la estabilidad financiera tiene «la garantía del Estado». El fondo de garantía de depósitos vamos a ser todos.
Sin duda el márketing del banco será: «el banco, para el que se lo trabaja». Así le va a Andalucía. Suerte este año con el PIB. Con bancos tan competitivos como este ¿el año que viene Andalucía será más productiva? No, pero hay elecciones y hay que cumplir el programa…