Los impuestos primero fueron una forma de distribuir el pago de bienes y servicios públicos. Luego fueron una forma de distribuir renta. Hoy son una herramienta electoral.
En todo el mundo el socialismo ha descubierto que puede dividir la sociedad en dos: los que pagan impuestos y los que viven a costa de los que pagan impuestos, utilizando el presupuesto como excusa. Todo gratis: Seguridad Social medicinas educación transporte… sin pagar nada en impuestos.
En Castilla-La Mancha han tardado un poquito más en enterarse, pero al final es lo mismo en todas partes.
Todo esto tiene un efecto electoral, porque se genera una clientela política que tiene interés monetario, para su sustento personal y de su familia, en que gobierne determinado partido político, que le dará de comer. Con la excusa de la ideología socialista, un partido se hace con más votos, utilizando el dinero del presupuesto.
Evidentemente, los votantes socialistas quedan esclavizados, porque en cuanto suben su nivel de renta dejan de poder vivir a costa de los demás.
En YouTube encontrarán varios vídeos de 2 minutos explicando esto mismo de modo gráfico si teclean en el buscador «la metáfora de los puercos salvajes». Hay varias versiones de lo mismo.