Por lo que se ve, los políticos tienen derecho a mentir. Da igual que sean de derechas o de izquierdas. Como decía un amigo mío, ya difunto: “la diferencia entre un político de derechas y otro de izquierdas es que los dos mienten pero sólo el de derechas se pone colorado”. Rajoy está convirtiendo en experiencia lo que dijo Lenin: “la mentira es un arma política”.Hay otra diferencia: los de izquierda mienten sobre sus pretensiones ideológicas y nos empobrecen a todos repartiendo miseria, sobre todo moral. Y los de derechas nos empobrecen a todos al pagar la miseria moral sobre la que mintieron los de izquierdas. Es el ciclo político que se genera cuando uno no tiene ideas claras. Sólo así se puede comprender la pronta creación de la “Tasa Rajoy”. Primero fue la “Tasa Aznar”, que pagan las grandes empresas cuando acuden a pedir justicia ante los Tribunales. Ahora es la Tasa Rajoy: se saca una foto con Zapatero y atiende a las ideas de Cayo Lara: en vez de hacer la reforma laboral y disminuir las indemnizaciones por despido, lo que se le ocurre es gravarnos con más impuestos. Porque nadie se va a dejar engañar pensando que la tasa la van a pagar los bancos. La vamos a pagar cada uno. Y más: si paraliza las transacciones financieras ¿por qué se queja de que no haya crédito para las PYMES? Con mayor presión fiscal no vamos a ninguna parte. Señor Rajoy, entérese de una vez: el problema de España es el gasto. Como ha dicho hoy Enrique Quemada: “El Gobierno de España ha acumulado un endeudamiento de más de diez veces lo que recauda anualmente en impuestos. Pero, además, suma cada año 90.000 millones de euros más (el 8% del PIB) en deuda”.