El 3 de febrero de 1995 Montoro dijo que para atacar el déficit había que bajar los impuestos. Y lo curioso es que Rato puso en práctica esa política y a todos nos fue bien. Después vino Zapatero y lo estropeó todo. Ahora ha vuelto Montoro, pero se ha hecho socialista.Sigue expropiando dinero para gastarlo en lo que él quiere y no en lo que quieren quienes lo han ganado. Él y Rajoy, en vez de poner el capital a producir, expropian a los productores y empleadores, vía impuestos, para malgastar el dinero que les quitan en improductivas políticas de subvención destinadas al clientelismo político. Han engañado a los votantes haciéndoles creer que iban a bajar los impuestos (es lo que decían) pero los han subido (es decir, han hecho todo lo contrario). Conviene recordarle a Montoro sus propias palabras: «la mejor forma de atacar el déficit es bajar los impuestos». Incluso así, Montoro no lleva razón: antes que bajar los impuestos hay que recortar las subvenciones del socialismo. Todas. Y además, bajar impuestos. Sólo así se pondrá España a producir y saldremos de la crisis. Y sigue diciendo Montoro: «nosotros lo que queremos es romper la regla básica del Gobierno socialista, según la cual para reducir el déficit hay que recaudar más. Creemos que la mejor manera de reducir el déficit es frenar el gasto y la mejor manera de frenar el gasto es bajar los impuestos». Está claro: Montoro se ha vuelto socialista.